viernes, 26 de septiembre de 2008

Inmigrantes sí, pero cualificados

El mundo es así de hipócrita. No sé de qué me sorprendo, aunque si te soy sincero, no sé si estoy sorprendido. En una Europa donde metemos en avión a inmigrantes drogados o en la que dejamos en alta mar que se mueran personas que intentan ganarse la vida como mejor saben, pero en la que ponemos alfombra roja cuando nos visita un jeque o un rey árabe que construye hoteles en Marbella, en este Europa, digo, no dejamos de hacer cosas así de extrañas.

Hace unos meses, los altos dirigentes del viejo continente abrieron las puertas a que los gobiernos menos escrupulosos pudieran hacer con los inmigrantes que les diera la gana, mandando al garete cualquier ordenamiento jurídico capaz de soportar el calificativo de democrático. Hoy, de nuevo las mismas cabezas, han creado una tarjeta azul -no sé si llevará el patrocinio de alguna gran superficie- para que los europeos sólo se traigan mano de obra cualificada.



Cuando en COU estudié Historia del Mundo Contemporáneo, al llegar al fenómeno del imperialismo y estudiar algunas de sus características, se decía que las metrópolis absorvían las materias primas de las colonias y se quedaban con todos los beneficios de las manufacturas que se producían en esos países a costos mucho más baratos. En aquellos manuales -no sé si hoy la Iglesia los permitiría- se añadía que esa era la razón de los problemas de subdesarrollo que vivían los estados africanos y sudamericanos.

El colonialismo se acabó, en teoría, en los años 60-70 del pasado siglo. Europa sigue hoy haciendo lo mismo que comentaban aquellos libros. Ya no quedan materias primas con las que destrozar a los países pobres. Ahora toca limpiarlos de cerebros, de trabajadores cualificados para hacer más grande al norte, para terminar de hundir en la miseria la sur. Y es que el atractivo de un inmigrante es directamente proporcional al grosor de su cartera o a su capacidad para reportar beneficios. Hombres y mujeres de usar y tirar.

Un saludo desde mi jardín.
Bomarzo no encuentra su sitio.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

E incluso con el tiempo se criticará a estos inmigrantes que vienen sin acordarnos de cómo ni por qué lo hacen; seguimos siendo unos pobres hipócritas olvidadizos (críticas a la fuga de cerebros hacia EEUU y el intento de las autoridades de mantener aquí a esos pocos cerebros) que miran su ombligo y sólo buscan parecerse al omnipresente y grandioso EEUU, pero nos olvidamos de que lo malo es lo que mas se pega... lo bueno llega cuando el mal ya está hecho.

Anónimo dijo...

Me imagino un mundo sin fronteras, sin razas definidas, sin ojos de colores.
Me imagino hablando con ese "Principito" y diciéndole:
¡ ves amigo, los mayores no somos tan extraños como tú crees !

Alfa79

SieLitO BiChO MaLo dijo...

Hace unos meses, en mitad de la anestesia de la Eurocopa, nos "metieron" la directiva de la "vergüenza" y nadie dijo nada... Lo más doloroso es que el partido socialista (excepto un grupo de socialistas catalanes) votó que si, ESA ES LA IZQUIERDA ESPAÑOLA Y EUROPEA...y la gente sigue anestesiada.........

Salud y Cariño

Vane

Bomarzo dijo...

"Aprendiza", no sabes la alegría que me da verte por aquí. Triste, pero cierto lo que dices.
Alfa, todos contaminados. Viva la contaminación.
Sielito, vuelves a tener razón. Tengo algún matiz, pero es tan nimio que no merece la pena.

Anónimo dijo...

Menuda disyuntiva tenemos ante nosotros... Realmente preocupante, ¿eh?

Nefer dijo...

Y luego se dan la palmadita en la espalda por lo bien que lo hacen.

Flipo Bomarzo... te acuerdas de lo que estudiaste en COU...!?

Saludos.

Bomarzo dijo...

Alberto, a mí me acojona.
Nefer, ya ves. De algunas cosas sí me acuerdo. Rarito que he salido.