viernes, 17 de octubre de 2008

Mis anticuerpos y yo

Perdón por el retraso. Acudo impuntual a mi cita bloguera con una cantidad incontable de anticuerpos en mi cuerpo, perdón por la redundancia. Sinceramente eso no sé qué significa. Perdón por la ignorancia. Sólo sé que hay virus de la fierbre amarilla haciendo botellón en mis venas. El tétanos, las fiebres tifoideas y hepatitis a y b le acompañan en una fiesta que me dejará la resaca a mí. Qué jodíos.

Hoy me he vacunado. El hospital Carlos III y su Unidad para el Viajero me ha inoculado tal cantidad de bichos. Ya estoy preparado para conocer el mundo que me espera. Cuatro pinchazos, cuatro que, con permiso de la autoridad y la anuencia climatológica, han dejado un "bello" recuerdo en cada una de mis extremidades, las superiores y las inferiores.

Sé lo que va a pasar. Mi compañera Belén se vacunó hace dos días y seguiré todos y cada uno de sus pasos. Esta tarde empezará a dolerme el brazo derecho (ahí ha sido el tétanos). Mañana no podré moverlo. Al atardecer subirá la fiebre y mañana estaré más atontado de lo que es habitual.

Me han prohibido hacer deporte (qué graciosos. Como si lo hiciera) y beber alcohol en las próximas 24 horas. Durante las dos semanas siguientes me meterán más dosis de hepatitis. Todo sea por el curro, pero maldita la gracia que me hace tanto pinchazo, jodel.

Un saludo desde mi jardín.
Bomarzo aseteado

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Jajajaja, pues no sé que decirte...
Es casi para salir corriendo. ;)

Anónimo dijo...

Uf Bomarzo, que mal rollo me da a mí tener tanto bicho en el cuerpo de fiestuqui y que luego te dejen echo unos zorros.

Espero que sean benévolos contigo. Cuídate!!

Besillos.

Anónimo dijo...

Bueno, como se suele decir "el fin justifica los medios" pero no deja de ser un fastidio. Ánimo.

Claro

Anónimo dijo...

¿A qué se debe tanto anticuerpo? Cuidado con los bichos.

Bomarzo dijo...

Bo, lo hubiera hecho.
Nefer, y no veas cómo duele.
Claro, pero hasta qué punto?
Anónimo, lo tendré.